Verdades ocultas | |
Juego | Max Payne |
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Parte | Un poco más cerca del Cielo (Tercera) |
Capítulo | 2 |
Capítulo anterior | Llévame al frío acero |
Capítulo siguiente | Profundidad Seis |
- "Las verdades ocultas estaban justo al doblar la esquina."
- ―Max Payne
Verdades ocultas es el segundo capítulo de la tercera parte de Max Payne.
Desarrollo[]
Los mercenarios siguen buscando a Max Payne en su intento por eliminarle. Nada más llegar, aparecerán dos de ellos. Una vez eliminados, Payne puede entrar en la pequeña sala para abastecerse y leer la carpeta de la mesa. En ella se relatan los planes que los mercenarios llevan a cabo para destruir las pruebas. Como curiosidad, un químico había intentado robar algo de V, pero ha sido capturado y encarcelado.
Cuando sigue adelante, se encuentra a otro mercenario, y delante de él una mina que deberá explotar. Esto provoca una fuga de gas que arde, así que debe cerrar el conducto si no quiere quemarse. Max seguirá avanzando por la pasarela al otro lado, no sin antes eliminar a dos mercenarios más.
La siguiente sala contiene varias minas colocadas estratégicamente. La mejor opción de Payne será lanzar una granada y huir de ahí. Cuando avance por la pasarela que había al otro lado (saldrá un mercenario por la pasarela anterior) llegará a otro pasillo lleno de minas de nuevo. Una vez más, la granada ayudará a eliminarlas. En este momento descubrirá dos fugas de aire más, y en este caso debe evitarlas cruzando por turnos entre una y la otra.
A continuación hay otro mercenario informando por radio que la trampa explosiva está colocada. Una vez caído, debe disparar al mando que hay dentro de la habitación, para abrir ésta y poder abastecerse. Cuando entre, podrá cerrar el flujo de gas que provoca que las llamas le impidan pasar.
Al pasar a la siguiente habitación, podrá comprobar los efectos de la explosión. No obstante, un mercenario le estará esperando desde el otro lado. Cuando lo elimine, puede bajar por las brechas al piso inferior. Allí se encontrará otro mercenario al otro lado de la sala, que deberá cruzar activando el pasillo de la pasarela. Para salir, explotará el barril cercano a la puerta, que empujará la carretilla elevadora.
Una vez accede a la siguiente sala de máquinas, otro nutrido grupo de mercenarios irá en su búsqueda. Cuando elimine a todos, deberá subir por la plataforma derruida a través del sistema maquinario que hay en el centro. Ya en el piso superior, Max puede avanzar hacia la sala que hay al lado, donde se monitoriza todas las actividades, y desde donde puede activar las puertas cerradas.
Si sigue al fondo y a la derecha, accederá a otra gran sala con dos mercenarios y munición. Ya en el piso inferior, podrá activar la grúa que destruirá la puerta de garaje cerrada. Tras ella habrán otros dos mercenarios con el gatillo a punto. Una vez eliminados, Max puede oír a otro de ellos recibiendo órdenes para ir en su búsqueda, distracción que puede aprovechar para elminarlo. También habrán minas que previamente eliminará, y bienes para abastecerse.
Cuando abre la siguiente puerta, Max descubre una gran sala llena de explosiones y bocanadas de fuego alrededor, además de minas colocadas estratégicamente para explotar. Disparando a estas, y esquivando los laberintos de fuego que hay, podrá llegar hasta la puerta de garaje que hay al final. Allí habrán hasta seis mercenarios en las habitaciones contiguas esperándole.
Tras eliminar las amenazas, Max podrá desactivar las bocanadas de fuego de la zona anterior. Si avanza por el almacén cercano, llegará a otra gran sala de fundición con más enemigos esperándole. Al cruzar la zona de lava central a través de un lateral, podrá llegar hasta una puerta donde le espera más compañía. Es el último mercenario antes de llegar al ascensor que le lleve a Profundidad Seis. Sin embargo, al llamar a éste se activará la alarma de búsqueda y aparecerán dos mercenarios desde dentro.
Novela gráfica[]
Video[]
Logros[]
Al completar este capítulo en la versión de Max Payne para teléfonos móviles, se consigue un logro: